- Múltiples religiones externas al catolicismo evitan el acto de untar ceniza.
- Aún los fieles católicos han perdido la tradición por falta de tiempo: Feligreses.
René R. Coca
Tapachula, Chis; FEB. 26 (interMEDIOS).- A pesar del incremento de religiones que compiten con el catolicismo en la región Soconusco, y de las diversas circunstancias adversas de los feligreses para visitar las iglesias de la zona, la comunidad católica preserva la tradición del Miércoles de Ceniza, por lo que la población tuvo a bien dar por iniciada la Cuaresma con este simbolismo que data desde el siglo II, y que permite la reflexión de muchos previo a la Semana Santa.
Al asistir a diversas iglesias católicas de Tapachula para observar la afluencia de feligreses ante el Miércoles de Ceniza, los representantes de cada templo coincidieron en que en la actualidad mucha gente trabaja o estudia por tiempo prolongado, lo que ocasiona que se vea cierta ausencia de católicos al recibir la ceniza, pero que aun así existen horarios de mayor conglomeración en esta tradición; sin embargo si se advierte que quienes más acuden a esta práctica religiosa son los adultos y personas mayores; así como alumnos de los colegios católicos.
Los entrevistados expusieron que otro factor adverso al Miércoles de Ceniza es que en la región se tiene la presencia de diversas iglesias donde por obvias razones desconocen esta tradición; sin embargo, ante el crecimiento de población, el catolicismo sigue con prevalencia a la imposición de la ceniza que nos recuerda entre otros mensajes que “polvo eres y en polvo te convertirás”.
Los catequistas católicos indicaron que con el Miércoles de Ceniza inician los 40 días en los que la Iglesia llama a los fieles a la conversión y a prepararse verdaderamente para vivir los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo en la Semana Santa. Para la ceremonia se deben quemar los restos de las palmas bendecidas el Domingo de Ramos del año anterior. Estas son rociadas con agua bendita y luego aromatizarlas con incienso.
Sobre la imposición de la ceniza explicaron que este acto tiene lugar en la misa al término de la homilía y está permitido que los laicos ayuden al sacerdote. Las cenizas son impuestas en la frente, al marcar la señal de la cruz con ellas mientras el ministro dice las palabras bíblicas: “Acuérdate que eres polvo y en polvo te convertirás”, o “Conviértete y cree en el Evangelio”. Luego, quien recibe las cenizas debe retirarse en silencio para meditar la frase o invitación que le pronunciaron. (iM-rrc).